El hospital aún no cuenta con una morgue para los pacientes fallecidos a causa del Covid-19. Ahora una lona fina y negra, doblada en dos partes para evitar su transparencia, se ha colocado amarrada solo hasta la mitad.
El cajón móvil que daba la bienvenida en la Ciudad Sanitaria Dr. Luis Eduardo Aybar permanece en el fondo de la explanada junto a otro similar, luego de ser reubicado por las autoridades de salud debido al gran reclamo de familiares y visitantes al centro hospitalario.
Ahora una lona fina y negra, doblada en dos partes para evitar su transparencia, se ha colocado amarrada solo hasta la mitad, hacia el punto de acceso, como un intento de evitar que la morgue de la Ciudad Sanitaria quede visible para todos.
No obstante, es la misma lona la que no parece “ocultar” la incomodidad de las personas que viven alrededor de la Ciudad Sanitaria y familiares que esperan noticias de sus enfermos, ya que aún perciben las prácticas con los cadáveres.
“Esa lona no ayuda, no son sólo las personas de afuera ¿Y los que estamos aquí adentro esperando?”, expresó un familiar de un paciente, mostrando molestia por los refrigeradores que son utilizados como morgue para los pacientes fallecidos por Covid-19 en el hospital Dr. Luis Eduardo Aybar, al mismo tiempo que espera noticias de su madre que se debate entre la vida y la muerte a causa de la misma enfermedad, reporta Listín Diario.
“Aquí uno ve todo. Nadie está acostumbrado a que estén pasando con tantas personas fallecidas. Yo estoy aquí desde las 9:00 de la mañana y no es a uno ni dos muertos que he visto pasar y la gente que espera por información de su familiar, llorando y nerviosa”, narró.
Agregó: “Mi hermana se puso mala y he visto mucha gente que se ha puesto mal, porque aunque no son familiares esas personas fallecidas, a ellos les impacta ver eso”.
Las personas que tienen pacientes enfermos deben ser testigos de cómo los médicos arrastran hasta el fondo camillas con personas fallecidas y aseguran que “nadie quiere estar en ese momento”.
“Ahora los furgones están al fondo, pero como quiera los muertos le pasan a uno por el frente y eso le da una depresión a uno, como angustia. Uno dice: ¡Señor, ¿será el mío? Porque la información la dan cuando ellos quieren”, contaba Jeisy Castro.
Hay quienes consideran el traslado de los cadáveres a de la Ciudad Sanitaria por la falta de morgue, como una “acción inhumana” como es el caso de Jesús María Moquete.
“Lo entendí como una acción inhumana, porque las morgue siempre están escondidas. Cuando vi eso por primera vez yo dije: ¡Dios mío, cómo puede ser?”, contaba.
El hospital aún no cuenta con una morgue para los pacientes fallecidos a causa del Covid-19.