En medio de una investigación de fijación de precios en toda la industria que ha acorralado a algunos de los fabricantes de genéricos más grandes, tres ejecutivos han enfrentado cargos federales por sus supuestos roles. Ahora, la amplia sonda ha atrapado a otro ex ejecutivo, esta vez un gran pez en la unidad de genéricos de Novartis.
Héctor Armando Kellum, ex alto ejecutivo de Sandoz, se declaró culpable el viernes de cargos federales de conspiración por su papel en un plan para fijar los precios de una variedad de productos del fabricante de medicamentos, incluido el clobetasol esteroide tópico y la crema antimicótica de nistatina y triamcinolona.
Kellum enfrenta 10 años de prisión y una multa de US$1millón, dijeron los fiscales en un comunicado. A cambio de su declaración, Kellum acordó cooperar con la investigación federal en curso.
La súplica de Kellum ahora ha confirmado el papel de Sandoz en el esquema, fácilmente la compañía más grande hasta ahora, pero más gigantes genéricos podrían estar en la línea de fuego a medida que se expande la alineación de testigos cooperantes.
El acuerdo de Kellum llega solo dos semanas después de que los fiscales acusaron a Ara Aprahamian, un ex ejecutivo de ventas de Taro Pharma. Aprahamian fue acusado el 4 de febrero de tres cargos de conspiración para fijar los precios de los medicamentos genéricos de la compañía y mentir a los investigadores.
Aprahamian fue atacado por sus períodos como vicepresidente de marketing y vicepresidente de ventas y marketing entre 2013 y 2016, durante el cual encabezó dos campañas de fijación de precios separadas con fabricantes de medicamentos no identificados en Nueva Jersey y Pensilvania y luego mintió sobre su papel en los esquemas, dijeron los fiscales.
Los fiscales federales llamaron a «conspiradores» de Kellum y Aprahamian en el esquema de fijación de precios, y el papel de Kellum cayó entre marzo de 2013 y al menos junio de 2015.
Los cargos de Kellum llevan el recuento total de ejecutivos acusados en la investigación federal de fijación de precios hasta cuatro, y tres ya han llegado a acuerdos de declaración de culpabilidad, dijeron los fiscales.
Además de Aprahamian, Jeffrey Glazer y Jason Malek, ex CEO y presidente de Heritage Pharmaceuticals, respectivamente, firmaron acuerdos en 2017 para liquidar los cargos nivelados el mes anterior.
Los fiscales también han presentado casos contra dos fabricantes de medicamentos con sede en Nueva Jersey, incluido Heritage, por su papel en los esquemas de fijación de precios. En esos casos, Rising Pharmaceuticals acordó en diciembre pagar 3 millones de dólares a cambio de una declaración de culpabilidad en un esquema para establecer los precios de la hipertensión con Benazepril HCTZ. Heritage llegó a un acuerdo en marzo para pagar US$7 millones para cooperar con los federales en su investigación.
La súplica de Kellum ahora ha confirmado el papel de Sandoz en el esquema, fácilmente el pez más grande hasta ahora, pero podrían haber más gigantes genéricos en la línea de fuego.
En mayo del año pasado, 44 estados lanzaron un caso gigantesco contra 20 fabricantes de medicamentos genéricos que el Fiscal General de Connecticut, William Tong llamó «el caso de cártel más grande en la historia de los Estados Unidos».
La demanda nombró directamente a Maureen Cavanaugh, ex vicepresidenta ejecutiva de Teva y directora comercial en Norteamérica, y tres ejecutivos de nivel inferior que ya no trabajan en la compañía. Además de Teva, la demanda involucró a Sandoz, Mylan, Pfizer y varios otros fabricantes líderes de medicamentos genéricos.
