
La aprobación del fármaco donanemab, que se venderá bajo la marca Kisunla, siguió las recomendaciones de los expertos externos de la agencia.
La Administración de Alimentos y Medicamentos, (FDA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos aprobó el martes el medicamento de Eli Lilly para el Alzheimer en etapa temprana, lo que lo convierte en la segunda terapia para retardar la progresión de la enfermedad que destruye el cerebro que estará disponible para pacientes en Estados Unidos.
La aprobación de donanemab, que se venderá bajo la marca Kisunla, siguió las recomendaciones de los expertos externos de la agencia, quienes respaldaron unánimemente su uso en pacientes con enfermedad de Alzheimer temprana, diciendo que los beneficios del medicamento superaban sus riesgos.
“Esto es un verdadero avance”, afirmó Joanne Pike, de la Asociación de Alzheimer. “Disponer de múltiples opciones de tratamiento es el tipo de avance que todos estábamos esperando, todos los que hemos sido afectados, incluso sorprendidos, por esta difícil y devastadora enfermedad”.
El fármaco rival Leqembi de Eisai y Biogen, aprobado hace un año, está diseñado para eliminar del cerebro una proteína relacionada con el Alzheimer llamada beta amiloide.
Un factor diferenciador clave del donanemab es la dosis finita del fármaco, que permite a los pacientes dejar de tomar el tratamiento una vez que las exploraciones cerebrales ya no muestran placas amiloides.
Lilly ha fijado el precio de su fármaco en 695.65 dólares por vial, o unos 32,000 dólares por un tratamiento de 12 meses compuesto por 13 infusiones. Es un precio ligeramente superior al de Leqembi de Eisai, que cuesta 26,500 dólares al año.
El analista de BMO, Evan Seigerman, dijo que el precio refleja el hecho de que los pacientes pueden interrumpir el tratamiento frente al tratamiento crónico con Leqembi.
“Los detalles de cómo se desarrollará en la práctica clínica aún no están claros, pero creo que ahorrará mucho dinero y a los pacientes les gustará mucho más”, dijo el Dr. Erik Musiek, neurólogo de la Universidad de Washington en el Hospital Barnes-Jewish.

































