Mientras la mayoría de los países del mundo proponen la apertura gradual de las actividades laborales para contrarrestar el impacto económico de la pandemia del COVID-19, nos encontramos en la inevitable encrucijada entre el llamado al deber y el temor a una situación de salud anubarrada con incertidumbre.
Hace solo dos días el director para Europa de la Organización Mundial de la Salud, Hans Kluge, advirtió que los países deben prepararse para una “segunda o tercera ola” del coronavirus mientras no tengamos la disponibilidad de una vacuna.
Contrario a todas las recomendaciones internacionales vemos como Suecia ha apostado a la inmunidad colectiva con la propagación del virus en su pueblo produciendo anticuerpos ante la infección. El gobierno sueco se limitó a indicarle a la población tomar medidas voluntarias depositando en ellos la confianza de cuidarse.
Aunque la decisión en nuestro país se limita a las recomendaciones de los organismos internacionales así como a los representantes del ministerio de Salud y del Poder Ejecutivo, no menos cierto es que al final la responsabilidad cae en nuestra cancha.
El virus que ocupa en la actualidad nuestra atención, no desaparecerá en el futuro inmediato por lo que resulta de interés promover las medidas con las cuales continuaremos a partir de ahora.
En República Dominicana las defunciones se han estabilizado, sin embargo contamos con un total de 7,954 casos a la fecha, hoy 5 de mayo 2020, con 376 nuevos casos en comparación al día de ayer (Boletín del ministerio de Salud Pública de la República Dominicana).
Lo anterior se traduce en un incremento no despreciable de casos positivos hasta la fecha debido a múltiples factores que inciden; lo que si queda claro es que las medidas generales a adoptar por la población al momento de reincorporarse no deben en lo absoluto mermar sino ser optimizadas por cada uno de nosotros.
A saber:
- La continuidad del uso de mascarillas debe ser la norma.
- El uso de guantes no se considera obligatorio (debido a que puede representar una fuente de contaminación adicional).
- De utilizarse guantes, medidas como no llevarse las manos a los ojos, boca y nariz al tenerlos colocados deben ser priorizadas.
- El lavado frecuente de manos debe mantenerse fuera y dentro del hogar.
- En las próximas semanas limite la frecuencia de exposición en los supermercados y farmacias.
- Evite las grandes concentraciones.
- Optimice las medidas de higiene en su hogar (desinfecte interruptores, juguetes, controles de TV, teléfonos, manillas de las puertas varias veces por día).
- La higiene en la cocina y los baños debe ser fortalecida.
- Valore limitar el ingreso a su residencia de visitantes en los próximos meses.
- Al salir tome en consideración lugares abiertos en las horas del día menos concurrida.
- Ante la presencia de síntomas debe seguir las recomendaciones del ministerio de Salud de la República Dominicana a través de su plataforma AURORA, además de avisar a su médico de cabecera.
- Por último aunque no menos importante, no olvide mantener la higiene de su vehículo. Para ello necesita: mascarillas, toallas desechables de papel, guantes desechables y spray desinfectante. Es importante que conozca las zonas que requieren especial atención en el vehículo son: las manecillas de las puertas, ajustes de la posición del asiento, volante, palanca de cambio y frenos, llave del vehículo, botón del aire acondicionado, control de radio, reposabrazos y el cinturón de seguridad).
Entendemos que repasar estas medidas con su familia marcarán la diferencia en los próximos meses en donde probablemente se apueste a una inmunidad colectiva. Compartir esta información será de gran ayuda en sus lugares de trabajo y su comunidad. Confiamos en poder seguir educándonos juntos.
Hasta una próxima entrega,
Dra. Jeimy Gómez.
