Santo Domingo.-En medio de una ola de calor extremo que amenaza con convertir septiembre en el mes más ardiente del año, el viceministro de Salud Colectiva, Eladio Pérez, lanzó un llamado urgente a la población para mantenerse altamente hidratada, especialmente quienes padecen enfermedades crónicas o forman parte de grupos vulnerables como los adultos mayores.
Con temperaturas en alza, Pérez alertó que una correcta hidratación no solo combate el calor, sino que también actúa como barrera preventiva contra golpes de calor, los cuales pueden derivar en desmayos, náuseas y vómitos luego de una exposición prolongada al sol.
El funcionario subrayó que la deshidratación puede desencadenar bajones de presión, y por ende, agravar condiciones como la hipertensión y elevar el riesgo de desmayos. “La presión está vinculada con la hidratación adecuada de la sangre y su distribución efectiva en el cuerpo,” explicó.
Quienes viven con afecciones como la diabetes o padecimientos cardiovasculares deben extremar precauciones frente a las altas temperaturas, que aumentan el estrés corporal y el peligro de complicaciones asociadas.
Pérez además advirtió sobre un problema poco percibido: los adultos mayores frecuentemente pierden la sensación de sed, por lo que es clave garantizar que consuman líquidos regularmente, ya sea agua, jugos, tizanas frías o frutas hidratantes.
Estas recomendaciones fueron hechas durante su participación en el “Encuentro Anual de Sociedades Epistémicas” celebrado en la Universidad Iberoamericana (UNIBE).
Claves ampliadas para reforzar el mensaje de salud:
• Impacto en la presión arterial: La falta de hidratación reduce el volumen sanguíneo, lo que obliga al corazón a trabajar el doble y puede generar hipotensión.
• Síntomas de alerta: Además de desmayos, náuseas y vómitos, la deshidratación severa puede provocar fatiga, dolor de cabeza, calambres musculares y, en casos extremos, convulsiones.
• Consejos prácticos: Se recomienda beber agua constantemente, consumir frutas como sandía o melón, y aprovechar momentos fuera del sol para reponer líquidos.
• Enfoque en grupos vulnerables: Los enfermos crónicos y adultos mayores requieren atención extra, ya que no siempre responden al estímulo natural de la sed.
• Recintos calurosos: Evitar exposición solar entre las 10 a.m. y las 4 p.m., usar ropa ligera y mantenerse en ambientes ventilados o con sombra.

































