Europa blinda sus residencias de ancianos y centros de mayores frente al coronavirus para proteger a un colectivo extremadamente vulnerable a la epidemia.
En España, la Comunidad de Madrid ha cerrado durante un mes sus 213 centros de día de personas mayores para evitar nuevos contagios.
Por su parte, el presidente francés, Emmanuel Macron, ha instado a restringir las visitas a estos establecimientos mientras prepara al país para medidas más drásticas, informa Euronews.
“Vamos a pasar, sin duda, en los próximos días a nueva fase, cuando el virus se extienda ampliamente por todas las regiones, y tendremos que seguir luchando contra este virus protegiendo a las personas que son más vulnerables”, ha dicho Macron.
Precisamente en Francia, han sido numerosos los contagios entre miembros de una comunidad evangélica que celebró una reunión con 2.000 participantes a finales de febrero.
Europa insiste en las medidas de contención para evitar que los contagios crezcan exponencialmente en poco tiempo, como ha comentado el presidente del Instituto Robert Koch, Lothar Wieler.
“Tenemos que tener cuidado de que no aparezcan demasiados pacientes al mismo tiempo, queremos que los casos vayan apareciendo durante un periodo más largo, y si nos preguntamos durante cuánto tiempo, sólo podemos decir que queremos que sea durante el periodo más largo posible”, ha añadido Wieler.
Otras médidas drásticas ya aplicadas son la requisición de los suministros médicos esenciales, como las mascarillas y los geles desinfectantes.
La Comisión Europea ha adoptado medidas preventivas porque el material empieza a escasear en algunos países.
“Hemos lanzado un procedimiento conjunto de suministro en el que toman parte veinte Estados miembros. El procedimiento está en marcha. Esperamos que lleguen las primeras ofertas la semana que viene y decidiremos. La Comisión está trabajando muy duro para asegurar el suministro suficiente de estos materiales en Europa”, ha explicado el comisario europeo de Gestión de Crisis, Janez Lenarčič.
Mientras, los expertos realizan ensayos clínicos en una de las poblaciones italianas que siguen aisladas en cuarentena. El objetivo es saber cómo actúa el coronavirus y cómo se propaga para encontrar un remedio efectivo.
Según los últimos datos oficiales disponibles, la cifra de personas enfermas en Europa alcanza las 5.842.
